Me gustas cuando callas porque estás como ausente, (y te tengo en silencio, expectante)
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca. (Mientras hablas, Te ignoro y te llamo loca)
Parece que los ojos se te hubieran volado (y tus ojos parecen temerme)
y parece que un beso te cerrara la boca. (Con un grito te callo la boca)
Como todas las cosas están llenas de mi alma (como todas las cosas son mías)
emerges de las cosas, llena del alma mía. (También me perteneces y tu alma)
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma, (hermosa y delicada, eres mía)
y te pareces a la palabra melancolía. (Aunque tu brillo se haya extinguido)
Me gustas cuando callas y estás como distante. (Me gusta cuando te callas, y miras al suelo)
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo. (Sollozas y te haces ovillo, delicada y lánguida)
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza: (expectante me sabes en todos lados)
déjame que me calle con el silencio tuyo. (Me perteneces incluso en tu silencio)
Déjame que te hable también con tu silencio (déjame dominarte sin decir palabra)
claro como una lámpara, simple como un anillo. (Quiero saber qué piensas y lo que sientes)
Eres como la noche, callada y constelada. (Miles de ideas rondan tu insondable mente)
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo. (Deseo saber qué tonterías piensas mientras callas)
Me gustas cuando callas porque estás como ausente. (Y te tengo en silencio, expectante)
Distante y dolorosa como si hubieras muerto. (Sin alma en los ojos, temerosa, y frágil)
Una palabra entonces, una sonrisa bastan. (Dime lo que quiero escuchar, ruega)
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto. (Eso es suficiente para que yo lo disfrute)
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