Por Iris Charo
Cuánto más complicada es la vida
para aquella que varón no ha nacido,
es menester hallar pronto salida
del yugo que con hombre le ha unido,
para no consagrarse a la cocina
ni a mimar al soldado que ha caído.
Vale más, en soledad, victoriosa rebelarse
a los mandatos que la sociedad impone,
aunque de loca, en adelante, se le tratase
y con destierro, pronto, se corone,
antes pues, al retiro se abandone,
soledad más no desolación, le complace.
Compañía hallará en las que como ella,
otros mundos en el mundo han observado,
ninguna anhela transfigurarse en doncella,
ambicionan cultivar su raciocinio indomado
para, con creces, ganarle la querella
a los de triste espíritu abollado.
No es rebeldía absurda, ni irracional libertinaje
apetecer lo que es parecer prohibido,
izar la mano, reivindicando con coraje,
aquello que por nacimiento se ha abolido
para el débil y subyugado linaje.
Más deseable es emerger desde el abismo
que vivir se asemeje a estar en tumba,
sellar los ojos, desdeñar con cinismo,
tolerar que la verdad sucumba.
Primero habrá que quebrantar tanto mutismo
para advertir que el corazón retumba.
Poema producto del taller on line "Club de poetas locas (Sylvia Plath)" de Salón Malintzin
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